Si se trata de la alimentación siempre debemos tener en cuenta que una alimentación balanceada y adecuada siempre influye no solo en la piel, las uñas y el cuerpo, si no también en el cabello.
Por un lado, para mantener un cabello saludable, se encuentran fundamentales las vitaminas y los minerales ya que estas desempeñan un papel esencial en el ciclo normal del cabello, en particular en la renovación de las células del bulbo folicular. Una ingesta insuficiente, se da cuando se sigue una dieta desequilibrada, puede ser una de las causas mayores para la pérdida del cabello. La deficiencia de algunas vitaminas y minerales promueve su fragilidad y acelera su caída.
Las necesidades diarias se pueden ver aumentadas por varios motivos como: un consumo rápido del nutriente, una disminución de su absorción o una falta de llegada a los tejidos capilares.
Siendo el caso del hierro en los procesos infecciosos o de las mayores necesidades se encuentra también el zinc en el cual hay situaciones en que se da un gran recambio celular como cicatrización de heridas o regeneración del cabello.
Los nutrientes necesarios para el cabello son principalmente: Aminoácidos azufrados, Zinc, Magnesio, Vitamina B6, Hierro, Ácido fólico, Cianocobalamina (B12), etc. Pero los anteriormente mencionados tienen un mayor y esencial impacto hacia el cabello.
La Taurina puede acumularse en piel y cabello, donde puede jugar un papel de protección. Este aminoácido no es tan esencial, pero puede ayudar a sintetizarse en conjunto con otros como la metionina o la cisteína siempre y cuando no se dé un déficit de Magnesio o de vitamina B6 necesarios para que tengan lugar esa síntesis. El cabello tiene estructuras de un gran recambio celular y en ellos las necesidades de aminoácidos son sumamente importantes y continuas.
Se ha observado que la administración de antioxidantes mediante alimentos o suplementos puede ser efectiva y ayudar a las fórmulas tópicas en lo que a la defensa antioxidante se refiere, ya que la biodisponibilidad de estos compuestos ha sido demostrada en numerosos estudios.
El pelo se considera muy importante por parte de la piel ya que la cubre casi en su totalidad. Cuenta con varias funciones, las que destacan protección en contra de elementos externos, dispersión de productos provenientes de las glándulas sebáceas, funciones sensitivas, así como aquellas de importancia psicosocial. El cuero cabelludo, sí tiene función de protección, es termorregulador y fuina para el enfriamiento, así como proteger a la piel del cuero cabelludo cuando se expone al sol.
Déficit de vitamina D perjudica y contribuye a la perdida de cabello.
La exposición al sol es una fácil y adecuada forma para sintetizar la vitamina D y la falta de este nutriente puede ser un factor agravante de la caída reaccional, especialmente en otoño.
Conclusión.
Una dieta saludable y con un balance te hará mantener un cabello saludable y con vida, para esto podemos optar por suplementos para así consumir las Vitaminas y Minerales necesarios en nuestro día a día, así como también es necesaria una buena higiene capilar. La exposición a los Rayos solares son una excelente manera de tomar la vitamina D, como se menciono anteriormente. Un Cabello sano y abundante es significado de una alimentación correcta, ya que por el cabello nos podemos dar cuenta de varios factores importantes sobre la salud, de los cuales muchas veces pasamos desapercibidos.
E.L.N. Jacqueline Jiménez Herrera
BIBLIOGRAFIA:
- www.ducray.com › es-cl › caida-del-cabello-oLa caída del cabello y las deficiencias nutricionales | Ducray
- www.medigraphic.com › pdfs › cutaneaActivos nutricionales y su efecto sobre el cabello
- https://www.elsevier.es/es-revista-farmacia-profesional-3-articulo-nutricion-salud-piel-el-cabello–13132077
- http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext