Una correcta alimentación desde niña hasta la edad fértil permitirá un desarrollo adecuado en diversos aspectos, entre ellos el de permitir una buena concepción, embarazo y parto. La nutrición en esta etapa es de vital importancia para la buena salud de la mujer y de su futuro embarazo.
Una dieta deficiente en vitaminas y minerales aumenta el riesgo de abortos, muertes neonatales o malformaciones congénitas.
Las niñas adolescentes y las mujeres necesitan consumir alimentos ricos en hierro, zinc y folatos y en ocasiones es importante suplementar con estos u otros nutrientes.
Los requerimientos de energía son muy variados ya sea por la edad, actividad física y condición de salud.
También es importante cuidar la cantidad de grasas y azucares refinados que se consume ya que estos alimentos en exceso pueden producir sobrepeso u obesidad.
Otro factor importante es el realizar ejercicio, por lo regular las mujeres que suelen pasar 16 o más horas del día sentadas, presentan un 68% más probabilidades de desarrollar enfermedad cardiovascular que aquellas que pasan menos de 4 horas por día; sin embargo si las mujeres logran caminar 180 minutos a la semana o realizar 90 minutos de ejercicio vigoroso a la semana, tienen 30 a 40% menor riesgo de desarrollar cardiopatía isquémica que sus homólogas sedentarias,
El estrés metabólico del ejercicio físico aumenta la oxidación de los carbohidratos y la tasa de oxidación de grasa durante los períodos de recuperación posterior al ejercicio, y mejora así los niveles de glucosa y la sensibilidad a la insulina durante 2 a 72 horas de acuerdo con la intensidad y duración del ejercicio
En mujeres en edad reproductiva las hormonas contribuyen en las diferencias en la respuesta al ejercicio. Estudios sugieren que las mujeres utilizan más grasa y menos hidratos de carbono como sustrato durante la misma intensidad de ejercicio de larga duración. Se plantea así la hipótesis que los niveles circulantes de estrógeno y progesterona pueden mediar esta respuesta ya que afectan el metabolismo de carbohidratos y lípidos, y producen una tasa de absorción de glucosa más lenta que puede reflejarse en hiperglucemia e hiperinsulinemia posterior al ejercicio.
Tenemos que tener en cuenta la importancia de llevar un estilo de vida saludable para que nuestra salud en cualquier etapa de la vida sea extraordinaria.
- Autor:
L. N. Yolitzin Paniagua Alonzo
Educadora en Diabetes
Referencias:
Revista Colombiana de cardiología Volumen25, suplemento 1 enero 2018 pag 125-131